El FC Barcelona, con un equipo con muchos jóvenes de la cantera, venció al Málaga CF por 1-3 en un partido intrascendente que le sirvió al conjunto que entrena Pep Guardiola para calentar motores antes de la final de la Liga de Campeones de Europa, que disputará en Londres ante el Manchester United.
El encuentro fue una fiesta para los locales, ya salvados matemáticamente del descenso, y tuvo acontecimientos importantes como el homenaje que realizó la plantilla del Málaga y el club a la afición y al guardameta Francesc Arnau, que se retiraba jugando frente su ex equipo y después de diez años en la formación andaluza.
El técnico del Málaga, Manuel Pellegrini, tuvo las bajas de dos delanteros muy importantes, el brasileño Julio Baptista y el venezolano José Salomón Rondón, lesionados, y además de la del defensa argentino Martín Demichelis, sancionado, por lo que el conjunto local también salió al terreno algo mermado de potencial.
El Málaga se tomó el partido muy en serio y nada más comenzar el portugués Duda disparó desde fuera del área e hizo intervenir al meta Pinto.
Era el primer aviso ante un Barcelona más tranquilo pero con mucha profesionalidad, por lo que a medida que iban pasando los minutos el ímpetu y el empuje de los malaguistas fue aflojando.
El primer lanzamiento a puerta de los visitantes fue a cargo de Jeffren, en el minuto 21, en una falta que acabó con el despeje Caballero a córner.
El trío Apoño, Maresca y Camacho estuvo desbordado por los rivales que se emparejaron con ello y la velocidad de las bandas no existió, por lo que la portería de Pinto pasó por poco peligro, aunque en la segunda aparición del Málaga en el área adversaria, en un cambio de orientación de Duda a Maresca, el balón quedó claro para el uruguayo Sebastián Fernández, quien puso el 1-0 rebasada la media hora.
El Málaga se animó y Juanmi tuvo el 2-0 pero su lanzamiento flojo delante de Pinto lo atajó el guardameta gaditano. De esa acción se pasó al empate por un penalti que señaló Clos Gómez y que fue muy protestado por los locales, quienes consideraron que Eliseu no le hizo falta a Bojan.
La segunda mitad tuvo los mismos ingredientes, control y dominio del Barcelona, ante un rival prudente que no renunció al ataque, y así Maresca pudo adelantar a su equipo pero el remate de cabeza salió fuera.
El Barcelona no estuvo insistente ante el área contraria, pero esporádicamente lo intentó, como Afellay en un contragolpe que contrarrestó Caballero.
A la segunda el delantero azulgrana no falló y con un tiro raso y potente desde fuera del área adelantó a su equipo a falta de un cuarto de hora para que se cumpliera el tiempo reglamentario.
El Málaga acusó el golpe del 1-2 y en un córner Bartra consiguió el tercero de cabeza en el minuto 84 ante la pasividad de la defensa local, con lo que ya se dio por finiquitado el partido.
No hay comentarios:
Publicar un comentario