La era Tito Vilanova en el Barça arrancó con la primera sesión de entrenamiento en la ciudad deportiva, contando con el regreso de los lesionados David Villa, Andreu Fontàs y Daniel Alves, que se han unido al resto de sus compañeros, capitaneados por Leo Messi.
La presencia del delantero Villa y los defensas Fontàs y Alves, en la recta final de la recuperación de sus respectivas lesiones, fueron la principal novedad de una sesión en la que veinte jugadores han estado bajo la mirada del nuevo técnico, Tito Vilanova, sustituto de Pep Guardiola.
Los primeros en llegar al campo número dos de la ciudad deportiva han sido los ocho jugadores del filial que se entrenarán estos días con el primer equipo, ya que Tito sólo dispone de catorce efectivos.
El meta Oier, Sergi Gómez, Planas, Sergi Roberto, Ilie , Rafinha, Kiko Femenía y Lobato esperaron diez minutos hasta que el técnico apareció seguido de Alves, Villa Alexis, Pinto, Mascherano, Afellay, Adriano, Fontàs, Bartra, Dos Santos, Muniesa y Lionel Messi, que ha salido el último del vestuario.
Vilanova ha dirigido las primeras palabras a sus nuevos discípulos, entre los que no se encontraban Isaac Cuenca y Thiago Alcántara, ambos trabajando en el gimnasio para dejar atrás sus lesiones.
El más activo, el formado por Messi, Mascherano, Afellay, Adriano, Pinto, Alexis, Alves, Fontàs, Lobato e Ilie, en el que no han faltado las bromas, como cuando Pinto recriminaba a un motivado Alves que no llegara a tiempo a cortar los pases de sus compañeros.
Precisamente el brasileño celebró en su cuenta de Twitter el haber podido completar del todo el entrenamiento de una hora y media, tras haberse fracturado la clavícula a final de la pasada temporada.
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