El entrenador chileno Manuel Pellegrini descartó ayer que el triunfo que su actual equipo, el Málaga, obtuvo el pasado sábado sobre el Real Madrid (3-2) en la liga española haya sido para él una revancha sobre su exclub, del que fue despedido en 2010.
“Muchos lo consideran como una revancha, pero yo no estoy dentro de ese grupo”, dijo el técnico al ser preguntado al respecto por los periodistas a su llegada a Chile para pasar con su familia las fiestas de fin de año.
En cambio, consideró que en lo deportivo, “terminamos un año brillante en Málaga. Estoy feliz, estamos haciendo las cosas muy bien y es bonito cerrar el año ganando al Real Madrid”.
El también exentrenador del Villarreal y el River Plate
argentino, entre otros equipos, admitió que el año “pudo ser mejor” de no haber existido problemas económicos en el Málaga, que por esa situación fue castigado por la UEFA con la marginación del próximo
torneo europeo al que se clasifique.
“Estos problemas no nos permitieron tener una temporada normal,
pero el grupo lo supo sacar adelante, clasificar en la Champions y estar arriba en la Liga”, agregó el técnico nacional, que tiene a su equipo instalado en los octavos de final de la Liga de Campeones y en los lugares de vanguardia de la liga española.
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