Cristiano Ronaldo volvió a ser decisivo para el Real Madrid y logró el tanto que sirvió a los blancos para empatar en los instantes finales ante el Athletic Bilbao (1-1), al tiempo que prolongó su idilio con el gol.
Ausente en la convocatoria ante el Málaga, la racha del atacante luso era más que prometedora después de ver puerta en sus últimos 11 partidos consecutivos y de hacerlo además en un total de 21 ocasiones.
El tanto de Williams en el minuto 14 que puso en ventaja al Athletic, que no hizo sino aumentar sus ganas de encontrarse con el gol. Muy activo en la zona de ataque, no se acercó con tanta claridad, pero siguió generando sensación de peligro en la zaga rival antes del descanso.
En la segunda mitad, con un Real ambicioso, pero menos fluido del centro del campo para adelante, siguió ofreciéndose.
Cuando el Athletic acariciaba su primer triunfo en el Santiago Bernabéu en más de 13 años, Cristiano tocó entonces lo justo un tiro de Modric que acabó colándose en la portería (1-1).
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