espués de toda una vida de la mano, el Madrid e Iker Casillas emprenderán dentro de poco caminos separados, quien sabe si para volverse a juntar algún día. Pero la salida de Iker no será por la puerta de atrás, sino por la puerta grande después de plantarse en los medios del Bernabéu y recibir la penúltima ovación de la afición que tanto le quiso.
Habrá festejo. Casillas y el club blanco están de acuerdo en cuidar no solo el fondo de su salida, sino también las formas. El Madrid sabe que Iker se merece la mejor de las despedidas y el capitán no quiere dejar el que será para siempre el equipo de su vida sin despedirse del Bernabéu.
“No queremos que sea un adiós, sino un hasta pronto, porque Casillas siempre tendrá abiertas las puertas del Real Madrid”, dicen desde las oficinas del Bernabéu, donde se trabaja también a contrarreloj para cuidar todos los detalles del protocolo para el adiós de Casillas.
El club quiere que la salida de Iker sea en un acto oficial en el Bernabéu, donde el capitán esté acompañado por el presidente, Florentino Pérez, además de sus familiares y, en lo posible, los compañeros de la primera plantilla.
Raúl y Guti, las últimas leyendas que se fueron del Real Madrid justo antes de la llegada de Mourinho, se marcharon de forma un poco precipitada y su salida quedó algo deslucida.
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