No fue una tarde cualquiera para Barcelona, la goleada por 1-5 en la cancha de Rayo Vallecano le sirvió para ser el nuevo dueño del récord de partidos invictos en Liga española, y también le sirve para seguir liderando cómodamente el torneo. Sin embargo, no fue un partido sencillo, de hecho estuvo lleno de polémicas.
Un inicio complicado. El Rayo en los primeros minutos tuvo a maltraer al Barsa, de hecho gozó de las mejores ocasiones en los 10 minutos iniciales, con los catalanes aún acomodándose en el campo de juego, los de Madrid aprovecharon para acorralar al Barsa y lo lograron.
Sin embargo, conforme pasaron los minutos toda esa euforia se apagó y el Barsa llegaba con más facilidad al arco rival.
A los 22 minutos Ivan Rakitic luego de una gran jugada logró abrir el marcador.
La debacle del valiente juego del Rayo vino cuando un minuto después del gol del croata, llegara el gol de Messi con una asistencia de Neymar, para muchos en posición adelantada. Luego del tanto los jugadores "rayistas" perdieron la compostura, protestando cada decisión del árbitro y al mismo tiempo siendo más violentos en el juego. Por eso a los 42' la expulsión del defensor de los madrileños, Diego Llorente, fue totalmente repudiada por los hinchas locales.
Messi estuvo una vez más por encima del resto, además del gol del primer tiempo, volvió a anotar a los 53' y a los 72', para igualar la cantidad histórica en la Liga española, cifra que comparte con Cristiano Ronaldo.
Arda Turan metió su primer gol con Barcelona, mientras que Manucho descontó para los locales.
Sin embargo, no fueron todas buenas para Barcelona. El delantero Luis Suárez falló un penal y se trató del séptimo fallo que tuvo el Barsa en 13 penales que le han cobrado durante la temporada. Es otra cifra histórica que ha igualado el conjunto catalán, aunque no para sentirse orgulloso de ello.
Más allá de ese dato el conjunto español sigue imparable y busca repetir los éxitos de la temporada pasada en Europa y en España.
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