El presidente del FC Barcelona, Josep Maria Bartomeu, insistió este sábado en que el club catalán no puede ser "un instrumento manipulable por unos intereses políticos", en el marco del proceso independentista de Cataluña.
"No seremos un instrumento manipulable por unos intereses políticos, sean de donde sean. Nadie puede apropiarse de nuestro escudo y bandera", afirmó el dirigente culé en la Asamblea General Ordinaria del club.
"Nadie puede dudar del compromiso del Barça con la comunidad catalana. Defendemos los principios de democracia, derecho de decidir y libre expresión, siempre con respeto", añadió Bartomeu.
El Barça es desde siempre uno de los símbolos del catalanismo. Bartomeu tomó la impopular decisión de que el partido ante Las Palmas se disputase a puerta cerrada el 1 de octubre, día del referéndum de independencia. Bartomeu describió esa decisión como "una de las más duras" que tomó como presidente.
Bartomeu condenó asimismo el encarcelamiento de los líderes civiles Jordi Sánchez y Jordi Cuixart, acusados de sedición. "Es inadmisible que en este siglo haya personas en prisión por sus ideas políticas", declaró.
El presidente también anunció que pedirá a los socios del club la aprobación de la propuesta final para el apellido que lleve el nombre del Camp Nou. "Las negociaciones para poner apellido al Camp Nou van por buen camino... Durante el primer semestre del próximo año convocaremos una asamblea extraordinaria", indicó sobre un proyecto que podría ayudar al club a financiar los 600 millones de euros en los que está presupuestada la remodelación del estadio.
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