El Barcelona puso corazón sin el fútbol de Lionel Messi para remontar en la recta final al Bayer Leverkusen en el Camp Nou, en una segunda jornada de Liga de Campeones que arrancó con recital de paradas de Jaume Domenech en Gerland ante el Lyon (0-1) y debacle inglesa con derrotas de Arsenal y Chelsea.
Pasó de ser colista de grupo a líder el vigente campeón de Europa, un Barcelona que puso a examen su 'Messidependencia' y tuvo una buena dosis de sufrimiento (2-1).
Aprovechando un nuevo error de Ter Stegen se adelantó el Leverkusen, con cabezazo de Kyriakos Papadopoulos a la salida en falso del portero alemán. Se esperaba el paso al frente en liderazgo de Neymar, que lo intentó sin éxito antes de que llegase una nueva lesión para la plaga azulgrana, la de Andrés Iniesta.
Perdonó 'Chicharito' la ocasión más clara del partido para la sentencia y con raza remontó en dos minutos el equipo de Luis Enrique. Marcaron los dos jugadores más regulares en el inicio de campaña, Sergi Roberto con fe en un rechace y Luis Suárez inapelable a una escuadra.
Una de las grandes sorpresas de la jornada llegó en el mismo grupo. El BATE vivió una noche mágica ante la Roma. En media hora un tanto de Stasevich y un doblete de Mladenovic, con grave error de colocación del portero a un disparo lejano desde la banda izquierda, provocó al conjunto italiano ir a la desesperada a por goles. La entrada de Iago Falque le cambió la cara y pese a los tantos de Gervinho, a pase del español, y Vassilios Torosidis, cae al último puesto del Grupo E.
El Valencia firmó un triunfo de gran valor en Gerland en un partido loco en el que comenzó frenado por los postes, encontró un premio merecido con un gran gol de Sofiane Feghouli, que chutó desde la frontal a la escuadra un rápido contragolpe conducido por Piatti y terminó salvado por el mejor del partido, el portero Jaume, que voló en el primer acto para sacar una falta ajustada y dejó dos grandes paradas en los segundos finales (0-1). Firma el pleno en su grupo, el H, el Zenit, que venció al Gent (2-1).
El morbo estaba en el Oporto-Chelsea y el reencuentro de Iker Casillas con José Mourinho. El portero comenzó luciéndose con paradas a Cesc Fábregas y Pedro Rodríguez, pero hizo la estatua en el tanto que significaba el empate en una falta de Willian.
Había marcado Andre en un rechace y el tanto del triunfo del equipo de Julen Lopetegui lo hizo Maicon en una acción de estrategia al primer palo en un saque de esquina. Con Hazard, el jugador más brillante del Chelsea de inicio en el banquillo, ya en el campo buscó sin premio el empate hasta el final y Diego Costa reclamó una posible mano del defensa local Marcano al árbitro español Mateu Lahoz.
Queda tercero el Chelsea de un grupo, el G, liderado por el Dinamo Kiev, que venció con firmeza a domicilio al Maccabi Tel-Aviv (0-2).
La mala noche del fútbol inglés la completó el Arsenal, que cayó en su estadio ante el Olympiacos (2-3), en un partido en el que fue castigado cada vez que reaccionó con un tanto. Es colista sin puntos en el Grupo F, en el que se pasea el Bayern Múnich, que goleó 5-0 al Dinamo Zagreb con triplete de Robert Lewandowski, que firma diez goles en una semana.
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